Muchas veces tenemos ante nosotros desafíos que nos hace la vida misma, dónde hay siempre dos opciones: seguir con la inercia de tu vida ordinaria o vivir los cambios con la incertidumbre y la pasión de enfrentarlos. Algunos preferimos pasar de largo, y nos quedamos con una vida predecible y apacible en apariencia, mientras otros, navegan a la aventura con resultados de pronóstico reservado. No es que esté bien o mal cualquiera de las dos opciones, lo cierto es que finalmente cada persona debe ser responsable de la toma de sus decisiones, y consciente de lo que gana o pierde en cada elección. Sin embargo, nunca estaría de más, apostar por enfrentar lo que hay atrás del miedo. Nuestros miedos generalmente son provocados por el mal llamado paradigma de la seguridad, nos han vendido esa idea, otra es el miedo a perder nuestra "paz" aunque no haya una evolución de nuestro ser. El miedo nos engaña de esta manera y nos paraliza. Enfrenta el miedo si...
'El último que salga que apague la luz y, que nunca vea a sus espaldas; que camine hasta encontrar otro tiempo, otra esperanza por la humanidad' . (Éxodos de Eros Ramazzotti)